Fue también la pasión que impulsó el primer paso
Desde la sonrisa infinita
Del loco Miguel pura vida en el rincón
Hasta las imágenes borrosas de la Televisión.
Y así fue que me perdí
De agonía, de muerte lenta,
Que me moría de pura poesía
Una madrugada del siglo 20.
Y fue hermoso así, perfecto así,
Descubrí que el futuro le pertenece a mis pies y manos
Y no hay intermediarios ni mapas hacia el corazón.
La magia de la andrajosa escuela de la ruta
Fue también la desolación que nos prometió el primer viaje
Cuando llegamos aquí
Sueño y corazón al viento por vez primera
Descubrimos las luces de la ciudad con ojos de primavera.
Y así fue que no sentimos
Miedo de llorar, de desesperar,
Que no sentimos miedo, ni miedo,
De llorar de tanto pecho ardiendo.
Y fue mágico así, eufórico así,
Descubrí que el destino le pertenece a mis pies y manos
Y no hay pasaportes ni aduanas hacia el corazón.
En cada noche temblando,
Cuerpo desnudo, bar y cerveza,
Esquina y corazón mutante,
Sonrisa apretada, alegría en el pecho,
Promesa y bendición.
Cada radio encendida esperando ese algo
Que corte antenas y corte venas,
Corte caminos, llegue al corazón y nos empuje a vivir,
Nos empuje a vivir.
En cada niño, estrella y luna,
Esperanza santa,
María cabeza planeta, canción volando,
Diamante y cigarro, visión latiendo,
Gota de sudor.
Cada fe en la vida
Que corte dolores viejos y corte inviernos,
Corte continentes, llegue al corazón y nos desnude a crecer,
Nos desnude a crecer, nos desnude a crecer.
No hay un solo pecado en ningún corazón,
No hay ningún error en ninguna ilusión,
No hay ninguna bandera en la mesa del bar
No hay ninguna frontera solo vivir y amar.